Al día de la fecha, 55 organizaciones de la sociedad civil y Academia se aliaron por el lanzamiento del “Compromiso por el Gran Chaco argentino 2030”, un documento que tiene como objetivo hacer un llamado a la acción a todos los sectores de la sociedad para proteger los bosques nativos de la región chaqueña.
El Gran Chaco es la ecorregión boscosa más extensa de Sudamérica después del Amazonas, ocupa 11 de las 23 provincias de nuestro país y es el soporte vivo de un entramado biológico, social y productivo que genera arraigo en el territorio e identidad propia. A pesar de su gran valor, el Gran Chaco es una de las regiones boscosas más amenazadas del planeta: se encuentra entre los 11 sitios con mayor deforestación del mundo y niveles más altos de degradación. Esta región enfrenta la pérdida sostenida de su patrimonio natural y cultural principalmente por el cambio de uso del suelo para producción agropecuaria y forestal y negocios inmobiliarios, causando deforestación, degradación de sus ambientes naturales, desplazamiento y empobrecimiento de las comunidades indígenas, extinción de especies y pérdida del patrimonio cultural. En Argentina ya hemos perdido más del 30% de los bosques chaqueños. Entre 2007 y 2017, a pesar de contar con la Ley de Bosques Nativos, perdimos cerca de 3 millones de hectáreas en la ecorregión, equivalente a la superficie de Misiones o 34 canchas de fútbol por hora.
Para hacer frente a esta situación, 55 organizaciones de la sociedad civil y Academia lanzaron el “Compromiso por el Gran Chaco argentino 2030”: una iniciativa que busca sumar voluntades para trabajar por la conservación y protección de nuestros bosques nativos y salvar a la región chaqueña. A través del documento firmado por dichas organizaciones, se pretende interpelar al Estado, al sector privado y a la sociedad civil a accionar urgentemente para evitar la deforestación y conversión de los ecosistemas naturales y sus graves consecuencias.
“Desde Vida Silvestre consideramos al Gran Chaco como una región prioritaria ya que concentra la mayor superficie de los bosques de nuestro país. En sus pastizales, humedales y bosques posee una diversidad de especies que la convierten en un área clave para la conservación”, afirma Manuel Jaramillo, Director General de Fundación Vida Silvestre. Y agrega:“Necesitamos compromisos de alto nivel político y empresarial, con metas ambiciosas, que involucren a todos los sectores de la sociedad para detener la actual pérdida y degradación de nuestros ecosistemas. Esta iniciativa, que nuclea a más de 50 organizaciones, demuestra la preocupación y el interés de la sociedad civil y la academia respecto de esta problemática y llama al resto de los sectores a que asuman responsabilidades y accionen en consecuencia”.
Esta iniciativa se suma a los movimientos que se vienen impulsando, tanto a nivel local como mundial, por científicos, jóvenes y demás sectores de la sociedad civil con la necesidad de accionar de manera urgente para revertir la crisis ambiental que estamos atravesando.
La ecorregión chaqueña es de gran importancia para los habitantes del territorio y del país ya que ofrece oportunidades para un desarrollo sostenible e inclusivo. Sin embargo, los bienes comunes y los servicios ecosistémicos que provee son finitos y requieren de un uso responsable y planificado que permita garantizar la subsistencia a lo largo del tiempo. Este proceso de conversión de tierras, por el cual los bosques y áreas naturales se transforman para el uso agropecuario, está ocurriendo a una tasa alarmante, ocasionando graves consecuencias ambientales, sociales y económicas.
El Gran Chaco se encuentra en situación de emergencia y necesita hoy del aporte de todos los sectores de la sociedad. Vos también podes sumarte y colaborar dejando tu firma en el siguiente link: www.compromisogranchaco.org/sumate