Securitas Argentina llevó adelante el webinar “Cómo planificar una salida responsable de la cuarentena” brindando herramientas y soluciones ante las distintas necesidades que nos plantea la realidad hoy.
El Covid-19 lo cambió todo: desde la forma en la que nos relacionamos y trabajamos, hasta cómo compramos y viajamos. Y aunque todavía no sepamos por cuánto tiempo más se extenderá la cuarentena, ¿quién no fantasea imaginando el día en el que podamos volver a la oficina o visitar un shopping?
Sin embargo, el gran desafío es lograr que ese regreso se concrete de manera responsable y segura para todos, tal es así como lo concibe la compañía de seguridad a partir del trabajo multidisciplinario de sus distintos expertos.
La realidad de hoy tiene muchos puntos de contacto con la ficción: manijas de puertas recubiertas con un nano-cristal mineral que actúa como un catalizador y que, al cargarse con la luz visible, crea una reacción de oxidación continua más fuerte que la lavandina; cámaras que de modo simultáneo hacen identificación facial, toman la temperatura y señalan en un grupo de hasta 30 personas en simultáneo, quiénes usan o no barbijo; túneles sanitizantes que aseguran que la mercadería que ingresa a un comercio está desinfectada.
Pero lejos de ser ficticios, esos recursos –entre otros muchos- existen y están disponibles en la Argentina según describió Alejandro García Cano, Director de Seguridad Electrónica y Soluciones de Securitas Argentina, durante el webinar “Cómo planificar una salida responsable de la cuarentena”. Dicho evento tuvo como objetivo central de brindar herramientas concretas que permitan abordar las necesidades actuales para lograr que la sociedad vuelva a la actividad comercial y laboral, a producir y a moverse en diferentes ambientes de manera segura, minimizando riesgos.
Protección múltiple e integral
Durante la exposición, García Cano explicó a clientes, periodistas, proveedores y público en general qué están haciendo en el país y el múltiple desafío que significa proteger a los empleados propios (el sector de la seguridad forma parte del grupo de trabajadores esenciales) y de los clientes que contratan el servicio, a los proveedores y visitantes circunstanciales de oficinas, comercios y empresas, y a quienes habitan en torres de alta circulación.
Aunque la tecnología es una aliada clave, apenas comenzada su exposición, García Cano se encargó de dejar en claro que se trata “apenas de una de las patas” del trípode sobre el que se desarrolla la estrategia de la compañía (Tecnología, Personas, Conocimiento).“Sin las personas capacitadas para leer de modo correcto toda la información que se recolecta a través de analytics, evaluar cuál o cuáles son las medidas apropiadas en cada caso, y ejecutarlas, nada sería posible”, dijo el Director de Seguridad Electrónica y Soluciones de Securitas Argentina.
“¿De qué sirve ver una pantalla que colorea las diferentes zonas corporales de 10 personas según su temperatura si no sabemos qué hacer con esa información? Ahí es donde aparece la verdadera solución integral: un equipo humano capacitado que actúa y reacciona de acuerdo con lo que cada caso demande”, agregó García Cano antes de contar que todos los Directores de las diferentes áreas de la empresa trabajan en el tema.
Consultar a los que saben
Según explicó, en la compañía fueron estudiando “cada solución e instrumento que fue saliendo al mercado” porque es fundamental diferenciar a los oportunistas de aquellos que ofrecen productos razonables y perdurables.
“Antes de comprar recursos tecnológicos, asesórense con expertos, pidan que les armen una propuesta seria y a medida. Cada caso es diferente. Hay muchas compañías que ya cuentan con alguna de estas tecnologías y uno de nuestros desafíos es lograr armonizar lo que tienen con lo que se necesitará ahora y en los próximos años”, aconsejó Garcia Cano a las empresas.
Riesgo patrimonial y sanitario
“Hoy hacemos dos tipos de análisis de riesgo: patrimonial y sanitario. Tratamos de determinar dónde están las vulnerabilidades para tratar de brindar soluciones integradas y a medida”, dijo mientras mostraba una infografía en las que podían observarse la cantidad de factores que deben atenderse de modo simultáneo en las grandes superficies comerciales como esas:
-Ingreso y egreso al shopping de los clientes. Hay cámaras que además de medir la temperatura de un grupo de hasta 30 personas en simultáneo, realizan identificación facial y establecen si la persona está usando barbijo. Toda esa información se analiza en tiempo real y establece mediante un sistema de semáforos, por ejemplo, si el lugar tiene capacidad habilitada para recibir a más visitantes (aforo).
Pero hay un dato asociado que resulta clave: el control de flujo y sentido de desplazamiento de los visitantes de modo tal de evitar aglomeraciones en los puntos entrada.
-Ingreso de mercadería. Los denominados túneles sanitizantes permiten una desinfección segura de la mercadería. Se trata de una cinta transportadora que está en permanente movimiento sobre la que se colocan los productos que son rociados con una solución de catión de amonio cuaternario.
-Ingreso/egreso baños. Se trata de una de las zonas de contacto con superficies altamente expuestas. Existen diferentes procedimientos de desinfección disponibles.
-Ingreso y egreso a las zonas bares y restaurantes. Lo ideal sería eliminar el uso del dinero en papel (a cambio, fomentar el uso de pago electrónico) para reducir las chances de contacto con superficies potencialmente contaminada.
-Protección en superficies de contacto frecuente. La apertura de puertas suele ser uno de los puntos cruciales y allí es donde Securitas aplica el componente denominado NanoSeptic®.
La convivencia entre el home office y la oficina
Aunque hay una creencia generalizada respecto de que el home office llegó para quedarse y con ello habrá menor densidad ocupacional en las oficinas, ese punto de encuentro laboral no desaparecerá, aunque definitivamente sufrirá varias adaptaciones, dejó en claro García Cano.
Por un lado, dijo que sería recomendable acordar una alternancia cíclica de asistencia del personal en horarios que busquen evitar las “horas pico” en el transporte, pero también actualizar las vías de ingreso y los mecanismos de control: “¿Quién aceptará apoyar el dedo para que un lector tome su huella? Hoy la mayoría seguramente tenga reservas hasta de pasar una tarjeta por un lector de RFID”, acotó.“Todos los elementos táctiles serán reemplazados por la detección facial con cámaras que tienen la capacidad de combinar eso con la detección de temperatura y el uso de barbijo de una persona”, explicó a continuación.
Resguardar los datos
Habló luego de otro costado clave a resguardar en estos tiempos: la ciberseguridad.
“Deberán extremarse las medidas de seguridad en ese sentido. Es muy importante que los usuarios tengan especial cuidado con la denominada IoT (Internet de las Cosas). Estamos en un tiempo en el que la pérdida de la confidencialidad es una posibilidad y por eso es clave contar con una protección profesional al respecto. Las cámaras irrumpen en nuestra vida cotidiana y de allí la relevancia de proteger el acceso a toda la información que se obtiene”, comentó.
