La Asamblea General de Naciones Unidas (ONU) declaró el 2022 como el Año Internacional del Vidrio, para destacar la importancia científica, económica y cultural de este material.
De acuerdo con la resolución aprobada el 18 de mayo del año pasado, 78 países se comprometieron a celebrar durante todo el 2022, diversas actividades encaminadas para aumentar la conciencia sobre la importancia del vidrio en la vida cotidiana, mediante congresos, seminarios, ferias industriales y exposiciones.
El objetivo es: “aumentar la conciencia sobre la importancia del vidrio en la vida cotidiana y a orientar en ese sentido la atención en materia de políticas”, expone la ONU en la resolución.
- En 1998, la ONU declaró el año internacional de los océanos, con el objetivo de generar nuevas ideas, debates y conciencia sobre los problemas del medio ambiente
Entre los eventos más destacados que habrá este año, se encuentran la conferencia de apertura en Suiza, el congreso de la ICG en Alemania y la Glass Expo en China. Dentro de Latinoamérica, se tienen planeados algunos eventos para hablar de la concientización sobre el uso de vidrio, como el Glass South America en Brasil, el Glass Tech en México y el ExpoCamacol en Colombia.
¿El vidrio en verdad es tan sostenible como se piensa?
El vidrio es un material que independientemente de la cantidad de veces que se recicle, mantiene el 100% de las propiedades iniciales. El reciclaje de envases de vidrio tiene grandes beneficios ambientales, al evitar la extracción de materias primas de la naturaleza, el ahorro de energía, disminuye las emisiones de CO2 a la atmósfera y contribuye a la puesta en marcha de una Economía Circular.
Sin embargo, esto se logra solo cuando hay prácticas de desecho y reciclado adecuadas, de lo contrario, el vidrio resulta perjudicial para el medio ambiente. Tan solo una botella de vidrio tarda más de 4,000 años en degradarse. Además, los fragmentos que quedan en bosques representan un peligro ya que aumentan la intensidad de los rayos del sol, ocasionando incendios forestales.
Como consecuencia del bajo reciclado, los hogares tiran los envases en la vía pública, barrancas, terrenos baldíos, etc., mientras que la mayoría de los hogares lo depositan en el camión recolector.
La principal razón detrás del poco interés de las empresas para reciclar el vidrio es la creencia popular de que con el paso del tiempo, los envases se convertirán en arena. No obstante, en los últimos años, proyectos de reciclaje como Cerrando el Ciclo, van rompiendo este mito, dándole una nueva visión a los envases como material con valor económico en vez de verlo como desecho. Su propósito es ver una botella de vidrio más allá de un residuo.
A través de la transformación de botellas de vidrio en diversos accesorios para el hogar, decoración o hasta productos sustitutos en la industria de la construcción, buscan crear conciencia sobre la importancia del vidrio en la vida diaria, contribuyendo a la producción y al consumo sostenible.