Con una propuesta totalmente innovadora para la industria alimentaria, Nat4Bio fue recientemente ganadora del reto global de Santander X ´Food for the Future´, entre más de 300 startups de 11 países. El objetivo era contribuir a paliar la escasez mundial de alimentos, promover una alimentación sostenible e innovar en los procesos de la industria alimentaria.
“Somos los primeros en utilizar microorganismos para desarrollar recubrimientos comestibles sin residuos que se aplican en la superficie de la fruta fresca. Estos recubrimientos son transparentes y sus principales funciones son regular el intercambio de gases entre la fruta y el ambiente, retrasando el proceso de maduración”, explica Joaquín Fisch, CEO y Co-Founder de Nat4Bio.
La historia de la startup comenzó en 2021, en el programa CEO por 48 hs de la aceleradora de empresas Grid Exponential cuando Joaquín conoce a Julia Fariña y Leandro Sánchez, sus ahora socios creadores de este proceso innovador. Ambos son microbiólogos, y descubrieron la sinergia que había entre el biopolímero y los microbios para hacer un recubrimiento de la fruta post cosecha.
“Somos la primer startup que hace esto a nivel mundial a partir de microbios”,destaca Fisch y agrega: “El valor agregado es que va a ser una fruta protegida por fuentes naturales”. La principal ventaja es la escalabilidad que tiene este proceso. Con un bio-reactor, una fuente de carbono simple como el azúcar y el microorganismo, que es el principal motor de todo el proceso, pueden obtenerse volúmenes de producción exponencialmente mayores, sin aumentar en igual medida la complejidad operativa, cosa que no sucede en operaciones basadas en plantas o insectos.
Por haber sido uno de los ganadores del reto Santander X, Nat4Bio obtuvo 10.000 euros y acceso a la red de empresas Santander, que los conecta con los recursos que necesitan para crecer: asesoramiento y formación, capital, clientes, entre otros recursos de valor.
Próximos pasos
Por el momento, Nat4Bio está finalizando los trámites regulatorios con SENASA en Argentina y con las agencias que regulan estos productos en Estados Unidos y en Europa, ya que deben contar con certificación regulatoria tanto en el origen como en el destino de la fruta.
Por otro lado, continúan realizando testeos en campo con limones en la provincia de Tucumán junto a productores líderes. Además, diseñaron un prototipo para probar en peras en el Alto Valle de Río Negro, y están trabajando con exportadores de cerezas. Por otro lado, continúan con el CONICET donde cuentan con su espacio de laboratorio, aunque para 2024, esperan agrandar el equipo y mudarse.