“Estamos muy lejos de cumplir los objetivos climáticos”. No actuar contra el cambio climático pone en peligro nuestra vida y nuestro desarrollo
La Organización Meteorológica Mundial (OMM) advirtió que la ciencia no deja lugar a dudas: a medio camino de la Agenda 2030, estamos muy lejos de cumplir los objetivos climáticos.
Según un nuevo informe interinstitucional coordinado por la agencia, esto repercute negativamente en el resto de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, y socava los esfuerzos mundiales para hacer frente al hambre, la pobreza y la mala salud, mejorar el acceso al agua potable y la energía y muchos otros aspectos de la Agenda 2030.
Unidos en la ciencia examina sistemáticamente el impacto del cambio climático y de las condiciones meteorológicas extremas en los objetivos, y pone de manifiesto que solo el 15% de los Objetivos van por buen camino.
El Secretario General de la ONU declaró al respecto que 2023 “ha demostrado con demasiada claridad que el cambio climático ya está aquí. Las temperaturas récord están abrasando la tierra y calentando el mar, mientras las condiciones meteorológicas extremas causan estragos en todo el planeta”.
António Guterres recordó que “la ciencia es fundamental para las soluciones. Se sabe que las ciencias meteorológicas, climáticas e hidrológicas son la base de la acción por el clima. Pero se reconoce menos cómo estas ciencias pueden impulsar el progreso de los Objetivos en todos los ámbitos”.
La reducción de emisiones, insuficiente
El informe advierte que, hasta ahora, los avances en la reducción de la brecha de emisiones (la diferencia entre las reducciones de emisiones prometidas por los países y las necesarias para alcanzar el objetivo de temperatura del Acuerdo de París) han sido muy limitados. Por el contrario, las emisiones de dióxido de carbono procedentes de combustibles fósiles aumentaron un 1% en todo el mundo en 2022 en comparación con 2021 y las estimaciones preliminares de enero a junio de 2023 muestran un nuevo aumento del 0,3%.
La OMM recuerda que, para cumplir los objetivos del Acuerdo de París de limitar el calentamiento a 1,5°C, las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero deben reducirse en un 45% para 2030, y las emisiones de dióxido de carbono deben aproximarse a cero neto para 2050. Esto exigirá transformaciones rápidas, sistémicas y a gran escala.
Según el informe, algunos cambios futuros en el clima son inevitables y potencialmente irreversibles, pero cada fracción de grado y tonelada de dióxido de carbono es importante para limitar el calentamiento global.